El 10 de enero de 1958 a las diez de la mañana salió del muelle Reina Victoria de la ciudad de Cádiz el buque escuela de la Armada Española Juan Sebastián de Elcano, para iniciar un crucero de instrucción que finalizará en julio.

A bordo se encuentra, formando parte de la correspondiente promoción de la Escuela Naval Militar, el guardiamarina Juan Carlos de Borbón y Borbón. Para despedir al buque llegaron al muelle el capitán general accidental del Departamento, almirante Colomina, el jefe de Estado Mayor, capitán de navío Enrique Barbudo, y el comandante militar de Marina, Manuel de la Puente. También acudieron al muelle para saludar al príncipe, su preceptor el duque de la Torre, y el escritor gaditano José María Pemán . El príncipe Juan Carlos de Borbón navegará en el Elcano hasta Annapolis (Estados Unidos), ya que por necesidades de su formación militar deberá regresar a España. El Juan Sebastián de Elcano tocará puertos de Perú, Colombia, Estados Unidos e Irlanda antes de llegar a Marín y Cádiz.

EL PRÍNCIPE EJERCIÓ DE ABANDERADO EN LOS DESFILES DE LOS GUARDIAMARINAS

El día anterior, el Príncipe Juan Carlos de Borbón, que se encontraba en Cádiz para embarcar como guardiamarina en el Elcano, acudió a San Fernando para conocer la casa que habitó su augusto padre cuando era alumno de la Escuela Naval de San Fernando.

En el llamado Recreo de López (camino de la Casería de Osio y conocido por El castillito) fue recibido por el gobernador civil. Juan Carlos de Borbón visitó con detalle todas las dependencias.

Bajo el mando del capitán de fragata José Ramón González, el Elcano hará escala en Las Palmas, Ciudad Trujillo (hoy Santo Domingo), Colón, Balboa, Callao, Cartagena de Indias, Norfolk, Annápolis, Dublín y Brest para concluir en Marín el 12 julio del mismo año.

Don Juan Carlos tomará parte de la tripulación hasta Norfolk, y desde Annápolis regresará a la Escuela Naval para realizar prácticas en los minadores con la promoción siguiente.